miércoles, 29 de marzo de 2017

Práctica 3: Entrevista Diagnóstica



La práctica tres abarcó las dos clases de prácticas de las semanas anteriores, en ellas, el objetivo era representar un role-playing; una entrevista, la primera de contacto entre un trabajador social y un usuario. Por grupos debíamos crear la historia y adjudicar a dos miembros del grupo los roles de profesional o usuario. El profesor nos tenía preparada una sorpresa y es que no íbamos a realizar la actividad con los miembros de nuestro grupo, sino que nos íbamos a mezclar con los demás, un factor sorpresa que nos llevaba a la improvisación más extrema. A través de estas entrevistas y “mini representaciones” los demás alumnos debíamos estar muy atentos y fijarnos en lo comportamientos, gestos, y consejos que le podía proporcionar el trabajador social o las demandas de los usuarios.


Historia: Mujer de 38 años, maltratado por su marido en paro, a veces psicológicamente y otras físicamente (no de gravedad), le preocupan sobre todo sus 2 hijos pequeños, pues tiene miedo de que su marido se los pueda quitar o le haga daño a sus hijos, a si como a que los niños se den cuenta de lo que pasa y piensen que su padre es malo , cuando ella no quiere eso, pues tiene de referencia a su padre como el mejor.

Por ello decide ir al centro municipal de servicios a visitar por primera vez al trabajador social para recibir ayuda para solucionar su problemática.


ENTREVISTA:


“-Entrevistador: ¡Buenos días Sra Potter, (le hace pasar y le estrecha su mano), pase y tome asiento!



-Entrevistada: (le estrecha la mano) Buenos días, gracias (se sienta).




-Entrevistador: Dígame ¿qué tal se encuentra hoy?



-Entrevistada: Bueno, un poco nerviosa, porque es la primera vez que asisto a una reunión así con trabajador y contar lo que me pasa ,y acerca del día…podría decirse que no es uno de los mejores días.




-Entrevistador: No se preocupe, no viene a que le juzguen sino a encontrar juntos una solución a su problema, cuénteme, qué ha sucedido para que no sea uno de los mejores días.



-Entrevistada: Pues mi marido y yo discutimos mucho últimamente, algunas veces hasta se va de casa o sale y no vuelve hasta muy tarde y sé que se va al bar, algunas conversaciones son fuertes, pero sobre todo me dice que no valgo para nada y que si nos divorciamos, se llevará a los niños y me quedaré sola, que nadie va a estar a mi lado y que mis hijos crecerán sabiendo que soy mala madre por no dejarles vivir con sus dos padres juntos.



-Entrevistador: ¿Desde cuándo pasa esto con su marido?



-Entrevistada: Hace ya 2 años, cuando mi marido se quedó en paro , pues la empresa en la que trabajaba quebró y tuvo que cerrar, desde entonces ha buscado trabajo por todas partes pero no ha logrado conseguir nada.



-Entrevistador: ¿Cómo era vuestra relación antes de que él se quedara en paro?



-Entrevistada: Muy buena, nos conocemos desde los 18 años, siempre habiamos tenido mucha complicidad, ¿cómo puede ser que con esto que está pasando yo ya no signifique nada para él? Es que no le reconozco.



-Entrevistador: ¿Su esposo cuenta con estudios?



-Entrevistada: Tiene hecho el BUP.


-Entrevistador: Muy bien, no se preocupe, nos iremos centrando en cada uno de los problemas para solucionar vuestra situación y recuperar vuestra pareja y estabilidad familiar. Guiaremos a su marido para que pueda encontrar lo más pronto posible un nuevo trabajo.



-Entrevistada: ¡qué bien muchísimas gracias! “


OPINIONES PERSONALES



“ En mi opinión, esta práctica nos sirvió para ensayar casos que nos pueden surgir ya que cada trabajador social no tenía ni idea de que le iba a tocar, y debía asumir su rol y realizar las preguntas oportunas para poder averiguar que le ocurría al usuario. “


“Desde mi punto de vista la práctica realizada entre usuario y trabajador social ha sido enriquecedora, ha hecho que podamos sentir las emociones que otras personas pueden transmitirnos, de manera que el miedo a salir, o tratar con extraños diariamente y en público sea muchísimo más bajo. Además a nuestro grupo le tocó interactuar con otro. Desde la posición de un compañero, como usurario, sintió la empatía y las emociones que la mujer preocupada por el consumo de estupefacientes de su hija, le estaba transmitiendo. Ahí era el momento de inventar una conversación y por ende seguir con la historia.

Gracias a la experiencia, el profesor Juan David pudo decirnos lo que hacíamos correctamente, y lo que nos quedaba por mejorar, destacando desde la excesiva rapidez del trabajador social al hablar y de la madurez y seguridad tan buenas con las que transmitía la ayuda.”


“Me ha parecido un poco confusa pero muy llamativa, pues en grupo al escribir nuestra historia no imaginé que no lo representaríamos nosotros y fue un poco raro ver como nuestro compañero David salía como trabajador social pero sin representar nuestra entrevista. No le veo sentido a haberla escrito pero por el contrario el improvisar acerca de ver a compañeros representar su historia y ver a otros compañeros tener que interpretar y hablar como trabajadores sociales ha sido muy interesante ya que a eso nos enfrentaremos todos los días dentro de unos años y nos da las herramientas para saber o poder actuar correctamente.”


“Coincido con mis compañeros en la parte de que esta práctica ha sido my útil para nuestro futuro laboral y ha servido para que nos hagamos una idea de lo que nos podremos encontrar en situaciones reales. El role-playing le añade ese toque de humor y quita presión a la vez que como ya he dicho, nos prepara para el futuro. Creo que el que el profesor nos mezclase a la hora de representar los roles nos ayudó, de esta manera pudimos improvisar y no tenerlo todo pensado.”




jueves, 9 de marzo de 2017

Práctica 2 : Yo como usuario/a



La segunda práctica que realizamos en clase, consistió esta vez en experiencias que nos hubieran pasado o que le hubieran pasado a alguien cercano a nosotros.

La práctica comenzaba con una serie de preguntas, las cuales había que redactar con tu historia. Estas preguntas eran ¿Qué paso?, ¿Cómo nos trataron?, ¿Cómo nos sentíamos al pedir ayuda? y ¿Cómo me hubieran gustado que me trataran, o como quiero que me traten en próximas ocasiones? Primero teníamos que realizarla individualmente, para después comentarla con tus compañeros de grupo de trabajo, y finalmente elegir una de entre nosotros y exponerla al resto de compañeros. Elegimos la de nuestra compañera, cuyo tema era el divorcio de sus padres: “Cuando tenía 16 años mis padres decidieron divorciarse y para que la convivencia fuese buena y que mi hermana pequeña y yo supiéramos afrontar este nuevo cambio, decidieron que todos deberíamos ir a terapia grupal con una psicóloga.

A esa edad como muchos adolescentes, también pase la increíble “edad del pavo”, por lo que el quedar con mis amigas un viernes por la tarde era mucho más importante que cualquier otra cosa, el primero día de terapia, para mi desgracia cayó en viernes, ¡vaya tela!, no podría ir con mis amigas hasta salir de la psicóloga y tal vez ya sería muy tarde, como muchos adolescentes intenté que mis padres me dejaran faltar o que cambiaran el día porque yo tenía sí o sí que salir con mis amigas, a lo que me contestaron que no, y como no podía ser de otra forma, llegó el viernes y yo iba a la consulta enfadada, de mal humor, y con ganas de que se terminase lo antes posible para poder salir de ahí e ir con mis amigas.

Al entrar a la consulta me senté con los brazos y las piernas cruzadas, con la cara muy seria y un tanto vuelta hacia donde no estaban mis padres para no tener que verlos. En cuanto entró la psicóloga lo primero que hizo fue, fijarse en mí, me preguntó cómo me llamaba y qué tal estaba, a lo que contesté de forma seca que bien, me preguntó que qué tal me iba en el colegio y volví a contestar que bien, y así más preguntas me hizo, pasado un rato, en el que estuvo hablando con los demás volvió a centrarse en mí, y me dijo que yo le parecía, deprimida, muy triste que seguramente iba a ser la que más tendría que volver y yo le dije que no, y me contesto que era muy evidente, pues casi no hablaba, era monótona y estaba sentada con los brazos y los pies cruzados, yo me enfadé, pues no era cierto, lo que yo quería era estar en el centro comercial con mis amigas, ¿tan difícil era eso de entender?, y le conteste que eso no era cierto que estaba sentada igual que ella con piernas y pies cruzados y que la única diferencia era que ella tenía entra las piernas una carpeta con papeles y boli en la que apuntaba cosas y que seguramente ella no estaría deprimida ni triste ¿no es así?, mis padres de inmediato me lanzaron una mirada de “cállate o ya verás”, pero en ese momento no me importaba, la psicología me dijo que si esa iba a ser mi actitud y no quería estar ahí que saliera de la consulta y esperara a mi familia en la sala de espera, por supuesto es lo que hice, eso sí, al salir mis padres, me cayó una gorda y por supuesto, me gané un no ver a mis amigas ni ese viernes ni el siguiente.


Me sentí muy incomprendida tanto por mis padres como por la psicología, pues todos pasamos por esa edad, y sabemos lo importantes que son los amigos para nosotros, y me hubiese gustado que me hubieran tenido en consideración, para ir otro día o un día que no hubiera planes con mis amigas, pero ahora con unos cuantos años más, lo veo con perspectiva y aunque sé que mi actitud no fue la correcta y que pude haber colaborado más, sigo pensando que algo mal hubo en esa ocasión, sobre todo por parte de la psicóloga pues sin conocerme más, ni indagar más sobre mí, saco muy rápido las conclusiones de lo que ella pensaba que me pasaba y no fueron nada ciertas y como profesional y futura profesional creo que juzgar tan rápido no es bueno.”


A continuación, el profesor comentaba las experiencias de los compañeros y daba pie para que los demás alumnos comentaran o contaran alguna experiencia relacionada con ese tema.

-En mi opinión, esta práctica me ha gustado porque, además de que nos ha ayudado, también con ella hemos aprendido a reflexionar sobre nuestra vida y a saber expresarnos con tranquilidad. Esta práctica consistía en confiar en tus compañeros, ya que les contamos nuestros sentimientos y ellos nos contaron los suyos, les damos una seguridad y una confianza de que no vamos a contar nada. Al fin y al cabo, es lo que vamos a tener que aprender cuando empecemos a trabajar como Trabajadores Sociales.

· En el momento en el que necesite ayuda, ahora me doy cuenta de que la práctica me ha servido y servirá para experiencias posteriores en las que he sabido gestionar la ayuda que me han brindado en los momentos difíciles. Gracias a la experiencia en grupo me he dado cuenta de que todo el mundo ha necesitado ayuda en algún momento de su vida y han logrado salir adelante con sus seres queridos.


· He de decir que , la práctica me ha gustado mucho y me ha ayudado a darme cuenta de que muchos de nosotros hemos sufrido experiencias parecidas, en las que no nos ha parecido bien el trato de un profesional, que se pueda deber a muchas cosas pero que aun así no es correcto y como futuros trabajadores sociales nos debe ayudar a darnos cuenta de que aunque tengamos un mal día, no tengamos ganas de escuchar a gente o de tratar con ellas, esas personas no tienen nada que ver con lo que nos sucede y debemos brindarles un trato adecuado y 100% amable pues podemos estar en una situación en la que la persona con la que estamos tratando necesita de gran ayuda y si no resolvemos su duda o no contestamos adecuadamente podemos asustarles, o causarles alguna molestia.

El objetivo de la práctica era claro, no podemos cargar cada uno con sus problemas días tras día, hay que confiar en los demás, no eres más débil por pedir ayuda o consejo, no debe darte vergüenza o apuro. Es por ese motivo por el que me ha resultado interesante esta actividad, admitir delante de la clase y en el grupo de compañeros, momentos de debilidad o situaciones personales delicadas y frustrantes para nosotros, admitir esa demanda de ayuda, y contar la historia... en cierto modo también nos hace liberarnos de nuestros miedos interiores, todos nosotros buscamos la comprensión y el cariño de los demás, somos seres sociales, y esta práctica nos ha ayudado a ir un paso más allá. Personalmente, estoy satisfecho con los resultados obtenidos.

viernes, 3 de marzo de 2017

Práctica 1º Autoconocimiento e identificación de emociones



La primera práctica que realizamos abordo el tema de las emociones, en la que cada uno teníamos que encontrar un sentimiento relacionado con la tristeza, la rabia y el miedo. En esta práctica, una alumna de nuestra clase nos ponía tres melodías y teníamos que interpretar cuáles eran nuestras sensaciones respecto a las emociones que se nos planteaban.


Tras escuchar las melodías, debíamos escribir en un trozo de papel lo que sintiéramos con el determinado sentimiento. A continuación, metíamos cada uno el papel doblado en un sobre. Y por último, leíamos en alto aleatoriamente los papeles, ya que cada uno lo realizábamos de forma anónima.


Aitana: "En mi opinión, me gusto mucho la práctica ya que con ello hemos sido capaces de reflexionar sobre nuestros sentimientos y saber plasmarlos en un papel, dándonos cuenta de qué tipos de pensamientos tenemos en nuestro interior. Y como con la ayuda de la música, somos capaces de reflexionar."


David: "Dese mi punto de vista, creo que ha sido una práctica lo suficientemente atractiva como para poder haberle prestado toda la atención necesaria y expresar nuestras emociones y sentimientos de forma anónima. Otro punto a favor, es el hecho de poder haber sido anónimos, y poder reflejar todas nuestras sensaciones en el papel y expresar lo que nos provoca al sentir esas emociones. Por último cabe destacar que el profesor desarrolla las actividades de forma lúdica y eso hace que a los alumnos les guste más el atender y participar en clase en todo momento."


Jessica: "Creo firmemente que a nivel personal, esto nos ayuda a conocernos mejor y a darnos cuenta de que no solo nosotros tenemos o creemos tener esos pensamientos o sentimientos, sino que son más comunes de lo que nos pensábamos y que juntos podemos crear una ayuda o una nueva percepción para cambiar o mejorar eso que nos está afectando, así como también nos ayuda como trabajadores sociales, una vez nos conocemos, a poder ayudar o guiar en los sentimientos a nuestros clientes.



Como reflexión personal creo que esto deberíamos hacerlo no solo con estos sentimientos sino con todos los demás porque eso mismo nos ayuda a saber cómo actuar hacia los demás y hacia nosotros mismos, e inclusive hacia un amigo o familiar que nos cuenta un problema relacionado con esto mismo y poder ayudarle o enfocar mejor su idea acerca de esa percepción."


Diego: "Estoy de acuerdo con mis compañeros, a simple vista podía parecer una práctica sencilla y sin mucha importancia, no obstante estaba equivocado, las cosas simples también pueden ser útiles y respecto a la importancia, opino que una vez realizada, a mí personalmente me ha servido más de lo esperado. Hay sentimientos y opiniones que están dentro de ti, y no te atreves a comentar en voz alta, de esta forma sí era posible. Es gratificante ver y escuchar que tus inquietudes o parte de ellas, son compartidas y entendidas por parte de los compañeros."



jueves, 2 de marzo de 2017

Hola mi gente!!!!!!!!!!!

Somos un grupo de Trabajo Social formado por el inigualable Diego Hernández, el pícaro de playa David Fontanet, la adorable Jessica Oropeza, y la carismática, Aitana Pallás. Este blog ha sido creado para subir las prácticas de la asignatura: Habilidades Sociales, impartida por el profesor Juan David Gómez. Esperemos que disfrutéis de este apasionante viaje. Nos leemos. :)